Probar tu idea de negocio es clave para ver si es un modelo de negocio viable y tener consideración para no desperdiciar recursos.
Te compartimos estos ocho pasos para probar completamente tu idea de negocio e identificar un mercado para ella.
Este artículo está dirigido a los aspirantes a emprendedores que se preparan para lanzar un nuevo negocio y que necesitan poner a prueba su idea.
¿Tienes una idea para el «próxima gran negocio»? Puedes pensar que tu idea es perfecta tal como está, pero es aconsejable probarla antes de invertir tiempo y dinero en desarrollar un negocio o producto para el que no hay mercado. Aquí te compartimos ocho pasos que te ayudarán a asegurarte de que la idea de tu producto sea algo que el mundo quiera, antes de lanzarla.
Tu idea de negocio, la importancia de ponerla a prueba.
Probar una idea de negocio es fundamental para su éxito. Si asumes ciegamente que una idea será un gran éxito, estás arriesgando una gran cantidad de tiempo, dinero y otros recursos en su lanzamiento. Las empresas a menudo omiten este paso porque tienen prisa por lanzar su producto. No crean un plan de negocios o un modelo de negocios basado en sus pruebas / investigaciones de mercado, y continúan su viaje comercial sin una ruta de negocio. Además, no logran identificar exactamente quién es su público objetivo. Hasta que no pruebes tu idea, no sabrás a quién le resultará útil. Sin esta información, tu marketing podría caer en oídos sordos y llevarlo a ninguna parte con la idea de tu producto, incluso si es excelente.
Probar tu idea de negocio es un paso preliminar necesario para identificar tu mercado objetivo y refinar tu idea de negocio con sus necesidades del mundo real.
Pasos para probar tu idea de negocio
A continuación, te presentamos ocho pasos para probar tu idea de negocio y determinar su propuesta de valor (por qué tú y no la competencia).
1. Construye un prototipo o servicio de prueba.
Aunque estés entusiasmado con la nueva idea de negocio, es posible que desees esperar un poco antes de probarla, dijo Juan Pablo Velázquez, capitalista de riesgo y emprendedor en serie. «Después de haber pasado por el proceso de escribir un montón de ideas, no me gusta apresurarme a desarrollar un plan de negocios o reclutar un equipo», dijo Velázquez. «Me gusta esperar unas semanas, para ver qué ideas realmente se quedan».
Velázquez dijo que solo se avanza si se tiene la sensación de que el mundo realmente necesita tu idea.
«Una vez que termines con eso, la mejor manera de probar una idea de negocio es construir un prototipo y mostrárselo a la gente para obtener comentarios honestos y auténticos», dijo.
2. Construye un producto mínimo viable.
Seguir el modelo “lean startup” (The Lean Startup) es una excelente manera de desarrollar tu negocio o un producto específico. Lo más importante es crear un producto mínimo viable (MVP).
Un MVP es «la forma más simple de tu idea realmente se puede vender como un producto», dijo Eric Ries, emprendedor de Silicon Valley y autor de The Lean Startup (Crown Business, 2011). Utilizando los principios de Lean Six Sigma, el libro de Ries aboga por tener una versión del producto para probar y comercializar al principio del proceso de desarrollo, de modo que cualquier ajuste o cambio sea una respuesta a los comentarios reales de la audiencia objetivo.
3. Ejecuta tu idea con un grupo de críticos (o amigos).
Cuando tengas listo tu primer prototipo o servicio de prueba, preséntalo a los posibles clientes objetivo.
«Debes hablar con y / o encuestar al menos a 50 clientes potenciales, para ver si se identifican con el problema de la misma manera que tu», dijo Manuel Flores, consultor de startups. «En otras palabras, debes averiguar si esto es un problema real para la mayoría de tu mercado objetivo, o solo para algunos».
Sin embargo, para poner realmente a prueba tu nueva idea de negocio, selecciona cuidadosamente a tus 50 clientes potenciales.
«Identifica a las personas en ese objetivo que sabes que son escépticas y críticas», dijo Chip Bell, fundador de la empresa de consultoría empresarial The Chip Bell Group. «Estas personas podrían ser clientes iracundos de encuentros anteriores o amigos que siempre adoptan la perspectiva del vaso medio vacío».
Bell recomienda elegir cuidadosamente tu grupo de prueba y luego pedirles a estas personas que separen muy bien sus ideas.
4. Modifica tu idea para que se adapte a tu mercado de prueba.
Velázquez adoptó un enfoque similar para probar su idea, una aplicación de búsqueda de videos de Internet que desarrolló y ha vendido desde entonces. Velázquez y su equipo fueron a campus universitarios y mostraron maquetas de cómo se vería el producto. Encontraron que los comentarios de los estudiantes eran invaluables para afinar la idea original.
«Pudimos medir rápidamente que las personas … se sentían frustradas porque no podían abrir una aplicación y poder encontrar los mejores videos de Internet de lo que les interesaba con solo tocar un botón», dijo.
Velázquez se dio cuenta de que, aunque su idea de negocio inicial y su maqueta eran un buen comienzo, necesitaban ajustes y muchos.
«Rápidamente supimos que estábamos en algo y luego nos enfocamos en desarrollar el producto, recaudar dinero, etc.», dijo.
5. Crea un sitio web de prueba con vínculos a las redes sociales.
Una vez que se corra la voz sobre tu producto o negocio, el mercado objetivo necesita un lugar para obtener más información al respecto o para mostrárselo a sus amigos. La creación de un sitio web simple con una página específica para el producto y el uso de las redes sociales son excelentes formas de proporcionar información y monitorear cuántas personas están interesadas en lo que vendes.
«Podrás saber si la idea obtendrá tracción a partir de la cantidad de clics en los anuncios y la cantidad de personas que completen tus formularios», dijo Flores.
6. Crea un plan de marketing y utilízalo.
Todo el trabajo preparatorio no significa nada si no realizas suficientes acciones para obtener una buena medida de respuesta. Una vez que tengas un producto viable, debes actuar sobre la base del interés en él, dijo Benjamín Salgado, consultor de emprendedores en estrategia de marketing y ventas.
«Habiendo trabajado con muchas startups, tanto por mi propia cuenta como emprendedor como asesor de otros, me gusta usar una regla que llamo 100 / 1,000», escribió Salgado en una publicación. «Realiza una lista de 100 cosas que puedes hacer para comercializar el producto, luego ejecuta esa lista de 100 y, en el proceso, habla con 1,000 personas sobre tu producto».
Si haces esto, tendrás datos (reales) sobre tu producto, dijo Salgado. Sabrás quiénes están interesados en él, qué estrategias de marketing funcionaron y no funcionaron, y cómo puedes mejorar, todos son pasos invaluables para hacer despegar tu idea y tu negocio, agregó.
7. Adopta una mentalidad de experimentación.
Demasiadas empresas tienen miedo de fracasar, por lo que no se ponen en condiciones de hacerlo. A menudo, esto parece evitar la búsqueda de nuevas ideas o no probar adecuadamente una idea de producto antes de lanzarla.
Al adoptar una mentalidad de experimentación, estarás más dispuesto a cometer errores y probar una variedad de ideas diferentes. Tu modelo de negocio desbloqueará más valor a largo plazo, ya que te dará más ideas y la oportunidad de hacerse realidad. En este caso, el fracaso también se considera un éxito, ya que te permite comprender mejor qué funciona y qué no en este mundo empresarial en constante cambio.
8. Implementa el pensamiento de diseño.
El pensamiento de diseño involucra los procesos cognitivos, estratégicos y prácticos de desarrollar nuevas ideas o productos. Ayuda a los innovadores a redefinir problemas y crear soluciones más creativas y mejores. En otras palabras, abre la puerta a descubrimientos e invenciones más innovadores.
Para implementar esta estrategia en tu negocio, debes seguir las cinco etapas del pensamiento de diseño: empatía (investigar / comprender las necesidades de tus clientes), definir (indicar los problemas y necesidades de tus clientes), idear (hacer una lluvia de ideas de soluciones únicas a sus problemas), prototipo (cree las soluciones) y, lo más importante, pruébalo (pruébalo contigo).
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